SEMINARIO "SELECCIÓN DE ESTRATEGIAS DE ENSEÑANZA Y ACTIVIDADES DE APRENDIZAJE". 

RELATO DEL TERCER ENCUENTRO

Queridos colegas: compartimos el relato del tercer encuentro del Seminario, en el cual abordamos la cuestión de la comunicación y los grupos.

Iniciamos la tarea con la lectura del fragmento de un texto de Young y la respuesta individual a las consignas para su análisis. En la puesta en común pudimos aclarar el significado de términos, acordar sobre el mensaje del autor y sus conceptos centrales, así como compartir preguntas sobre y a partir del texto. Esto generó una interesante discusión acerca de la función de las preguntas en las clases. La lectura de un breve apartado del texto de Delamont nos invitó a reflexionar sobre las características del trabajo del profesor y la dinámica de comunicación en las clases, que suele atentar contra la debida atención a preguntas prometedoras.

Revisamos entonces cada una de las consignas incluidas en este trabajo y su función en la delimitación del área de discusión así como en la generación de visiones divergentes.

A continuación pensamos si habíamos podido funcionar como grupo: hubo consenso entre los participantes en responder de modo positivo. Eso nos condujo a explicitar qué entendíamos por “grupo” y a identificar sus elementos centrales (objetivos comunes, roles, normas, tarea, interacción). Al respecto, diferenciamos los conceptos de participación y de interacción: en esta última tengo en cuenta al otro, su aporte me interpela. Pero para ello es fundamental que el docente genere este intercambio.

Contrastamos entonces esta idea con lo que ocurre en las clases, reconociendo que no en todas las situaciones se conforma un grupo de aprendizaje centrado en la tarea.

Surgió la pregunta acerca de si necesariamente debemos tender a la constitución de un grupo y evaluamos que esto podía potenciar los aprendizajes individuales. Consideramos también que la participación de los alumnos permite advertir dificultades, inducir a aprender del error, compartir visiones diferentes, generar nuevas preguntas, promover la reflexión, regular el ritmo de la clase, entre otros.

Rescatamos, por último, el valor de contar con un plan de trabajo que permita enfocar los esfuerzos alrededor de una propuesta clara y la necesidad de determinados roles para el buen funcionamiento grupal (y para evitar que el grupo se convierta en masa).

Hacia el final del encuentro se aclararon aspectos de los relatos de clase y del trabajo final, cuyas pautas serán explicitadas en otra entrada de este blog.

Para seguir pensando en las preguntas que formulamos en la clase recomendamos la lectura del texto “El trabajo reflexivo en el aula”, que será subido a la plataforma de la Universidad, junto con una conferencia de Zabalza sobre “Didáctica universitaria” y un material para quienes deseen seguir leyendo acerca de métodos de enseñanza (“Veinte modelos didácticos”).

Todos los comentarios que quieran compartir en este blog acerca de este encuentro o del seminario en su totalidad serán apreciados.

Aprovechamos para agradecer el compromiso de quienes nos acompañaron en este trayecto, así como las observaciones volcadas en las encuestas. Nos seguimos comunicando a través de este medio y del correo de la Diplomatura.

Cariños,

Verónika y Norma